Noche de un viernes comun, llega con deseos de hacer lo de siempre y luego salir a dar una vuelta y tomarse unos tragos, esta cansado de los trabajos semanales. Solo quiere olvidar un poco y relajarse en un cafe o un bar de moda con los muchachos. Ella no muetra interes a nada y solo quiere quedarse en casa a ver la tele, los amigos llamando para ver a que hora se juntan y en donde. El quiere salir a divertirse y no quiere disgustarla , en cambio esta molesta por que no la toma en cuenta a la hora de decidir, mientras espera a saber que haran toma un trago a la roca, degustando lentamente el aroma del escoces.
Hay un aire de pesadez disfrazado en el ambiente, ella habla poco mientras el explica lo sucedido durante los dias pasados, esperando que se vista y salgan ya. Se van pasando las horas y pregunta que Que pasa, que no salimos ya?. Estamos aqui como vegetando y perdiendo el tiempo que podemos disfrutar. Los muchachos nos esperan en Montecristo Cafe, ahi estan todos, como es la costumbre de los viernes antes de decidir a que lugar iran, ella solo quiere tenerlo todo.
Salen casi por obligacion, ella desanimada y no deseaba compartir con nadie, en cambio el encantado de estar en compania con los amigos, bailar, comer y tomar tragos hasta que les avise de su llegada el sol. Se despiden y cada quien a su vivienda,
el dia se acorta por la larga dormidera sabatina, se despiertan sin saber que hora es, dandose vueltas en la cama para despertar el cuerpo de tantas horas de descanso, los ojos cerrados y el estomago en pijama por el largo periodo de ayuno saben que deben salir a comer algo y activarse nuevamente para la noche de juerga y placer que les espera. Se van despertando lentamente y conjuntamente los sentidos y necesidad de un sexo meridiano le toma toda la mente, comienzan a dar los primeros movimientos en pos de realizar la tarea primaria de todo ser viviente que le sirve para perpetuar la especie y dar sentido a la existencia, Felices ambos por la oportunidad de entregarse en cuerpo, porque ya en alma estan el uno dentro del otro. Envueltos en el desorden y el amor hablan de cosas que solo los enamorados hablan, aquellas cosas que, en algunos casos se agotan y luego llega el carro cargado de ocio y tedio emocional, donde estan ahi, pero a distancia entre ellos. Este no es el su caso, estan saturados de amor para dejar pasar un minuto de disfrute a toda capacidad. Son los anos de desaliento que dividen el alma en cuartos, donde comienzan a habitar el dasgano, la desesperanza y sus aliados, torturando cada segundo de latir de un corazon que olvido los saltos de emocion, y las subidas de adrenalina del organismo cuando es sometido por anos a vivir sin esos alimentos que le dan alegria y estimulo para latir.
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